27 de febrero de 2007

Jose Saramago

Y recordó aquél 27 de febrero, corría el 2007, en el que escribió:

Si como fotógrafo, hoy he tenido la enorme satisfacción de haberle realizado un reportaje fotográfico a, ni más ni menos, un premio Nóbel de literatura, como persona aún me siento más orgulloso y realizado, porque he tenido la oportunidad de conocer, departir y estrechar la mano de una persona sencillamente maravillosa: José Saramago.

Podría exaltar su figura literaria, sus obras, su trabajo,… pero me quedo con la calidad humana, la profundidad de su mirada y su cálida y acogedora expresión con la que transmite una enorme serenidad, calma y sosiego,… es imposible olvidar esa plácida figura.

… y rememoró, por eso y otras cosas más, aquel día feliz del que conserva algunas fotos, un libro firmado de puño y letra que dice: “para Manolo Navarro con mi simpatía; José Saramago (firma); 27-2-2007” y un bello recuerdo.

Manolo Navarro

26 de febrero de 2007

... y el resto de la baraja...

… y el pensó…

¡caramba... nos llevamos todo el juego
anhelando por los ases de la baraja!
¡como si el resto de naipes no existieran!


¡ si fuéramos más inteligentes caeríamos en la cuenta
que son estos, los que con su humildad y modestia
conforman la mayoría del reparto en el juego!

… y escribió…

"Jugar...
con sólo ases… es difícil,
sin ellos y con el resto de las cartas…
...a lo que tú quieras
"

... y afirmó…

los ases son... al egoísmo…
… lo que el resto de cartas son... a la vida…"


Manolo Navarro

24 de febrero de 2007

... de nostalgias y tristezas...

Dormitaba en el sofá, mirando sin ver una aburrida televisión,
sus manos, encalladas ya por el tiempo,... temblaban acompasadamente.

Sus cansados músculos de muchos y tantos años, reposaban sin descansar,
y sus azules ojos, apenas emborronaban... la lógica nitidez.

Pero su mente latía con ganas y fuerza en su intimidad,
y en su interior cabalgaban miles de recuerdos, que le hablaban sin cesar;

... y escribía y... escribió...
este su humilde cuaderno de bitácoras...

...sus recuerdos, sus locuras, sus aventuras y desventuras,...

... y al final...
para aquel anciano desalentado, fue su más preciado tesoro.

…las nostalgias y otras tristezas…

de un alocado fotógrafo...
que hablaran a través de su fotografía.

¡por favor... oinganlas!

Manolo Navarro